El transporte en carretera para el destino vacacional

¡Ya estamos en pleno verano! ¡Ya han llegado las vacaciones para muchos de nosotros! ¡Por fin llegó agosto! y como todos los años, cogemos las maletas y partimos de viaje para desconectar de nuestras rutinas. No sin antes informarnos para evitar riesgos en la carretera.

Unos días de relax para recargar pilas son imprescindibles. Necesitamos hacer un kit kat, necesitamos desconectar en la medida de lo posible de nuestro día a día. Es una tarea difícil de conseguir pero muy aconsejable para volver con intensidad, con nuevas ideas, con fuerzas para afrontar nuevos proyectos…

Los destinos de nuestras vacaciones son muy variopintos. Algunos volarán para visitar nuevos países o playas exóticas- Otros acabarán en su lugar habitual de veraneo. Ya sea en la montaña, la playa o en zonas del interior de nuestro país. Y el resto se dirigirán por carretera a destinos no conocidos de nuestra geografía e incluso al extranjero. Pero en todos estos destinos se repite un elemento común, “el transporte por carretera”.

Con el fin de evitar situaciones de riesgo en la carretera, en primer lugar debemos extremar las precauciones al conducir. En segundo lugar, y como factor fundamental para mitigar cualquier tipo de riesgo, debemos de revisar completamente el coche y someterlo a lo que sería una revisión pre-vacacional.

Top Recambios, Cliente Colaborador de Global Seguros de Crédito

En este sentido, tenemos la suerte de colaborar estrechamente desde hace años con Top Recambios, empresa familiar valenciana LIDER en el sector de recambios y mantenimiento de automóviles.

No se nos ocurre a nadie mejor que Top Recambios para que nos oriente y nos asesore al respecto.

Gracias a su experiencia y especialización en el sector. Vamos a identificar cuáles son las principales medidas de prevención que debemos de tener en cuenta en la revisión de nuestros vehículos. Y vamos a poner en valor lo que consideramos más importante en la puesta a punto de cada máquina.

Estado de Neumáticos:

Revisar la presión de los neumáticos es de suma importancia para mantener la presión correcta, evitaremos posibles reventones y exceso de distancia de frenada en situaciones límite, tal vez sea el factor más importante para nuestra seguridad y no siempre le prestamos la atención que debiese.

Debemos asegurarnos que el dibujo del neumático no es inferior a 1,6 mm. Podemos comprobarlo fácilmente fijándonos en los avisadores de desgaste que incorporan todos los neumáticos. Por debajo de esta medición el neumático pierde más del 80% de las propiedades. Y podemos poner en riesgo la seguridad de los ocupantes. También hay que destacar que nos pueden multar si llevamos los neumáticos por debajo de esta medida.

Es muy importante fijarnos en los laterales de cada “goma”, debemos revisar el neumático por si encontrásemos bultos o rajas. Los bultos en el lateral del neumático son sinónimo de rotura interna de lonas. O lo que es lo mismo, un neumático roto internamente, a una velocidad de 120 km/h, puede suponer un reventón.

Revisión de frenos:

Revisar el grosor del ferodo* de la pastilla de freno. Para ello debemos llevar el vehículo al taller para asegurarnos de no quedarnos sin ferodo en las pastillas. Si esto ocurre, se llega al hierro de la pastilla y en este punto nuestra frenada es muy deficiente. Así dañamos los discos de freno, es el segundo factor de seguridad más importante de los vehículos.

Revisar el nivel del líquido de frenos:

El líquido de frenos tiene que estar al nivel que indica su depósito. Ya que es el encargado de ejercer la presión correcta en el circuito, un nivel de frenos bajo supone inseguridad en la frenada.

El líquido de frenos no es un líquido permanente como algunos piensan. El líquido de frenos al igual que el aceite del motor pierde propiedades con los años. Es aconsejable realizar el cambio del líquido de frenos cada 2 años.

También debemos asegurarnos de que los latiguillos del sistema no sufran ninguna pérdida ni supuren. Esto puede provocar la pérdida de los frenos y un accidente casi seguro.

Control del nivel de aceite en el motor:

Es importante revisar el nivel de aceite (siempre entre el máximo y el mínimo) con el motor caliente. Y a ser posible aprovisionarnos con una pequeña lata si vamos a hacer muchos kilómetros. Una vez llegados al destino conviene volver a revisar por si el vehículo ha tenido algún tipo de consumo. En ese caso rellenar siempre entre el máximo y el mínimo con el motor caliente.

Cabe recordar que el aceite de motor no solo se cambia por kilometraje. También se debe cambiar a los 2 años aunque no lleguemos al kilometraje indicado por el fabricante. Los aceites de motor, al igual que los de mesa, pierden propiedades con el tiempo.

Hay que revisar siempre que no haya pérdidas ni marcas en el suelo del garaje, en ese caso acudir inmediatamente al taller.

Control líquido refrigerante:

El líquido refrigerante en estas fechas del año se evapora con facilidad debido a las temperaturas. Es muy importante revisar su nivel y llevar una garrafa de anticongelante en el maletero.

Con las altas temperaturas el sistema de refrigeración trabaja mucho más y los materiales que componen el circuito sufren pérdidas a causa de la dilatación. Hay que revisar constantemente las posibles pérdidas de líquido refrigerante, podríamos romper literalmente el motor si perdemos el agua del circuito.

Aire acondicionado:

Recordemos que el sistema de aire acondicionado de los vehículos lleva filtro, conocido como filtro antipartículas o filtro de polen. Y es importante cambiarlo cada año cuando empieza el calor. Ya que un filtro obstruido no deja pasar el aire correctamente al interior del vehículo y, por consiguiente, el habitáculo no se enfría al ritmo normal, además trabaja más el sistema y puede producir averías.

Como conclusión, el buen estado de nuestros vehículos es fundamental para evitar situaciones de riesgo en la conducción. Con esta guía abordamos los puntos más críticos, simplemente son 6 pasos, así que ya tenemos tareas antes de emprender nuestras vacaciones, esperamos que os ayude a todos.

* Material formado con fibras de amianto e hilos metálicos que se emplea principalmente para forrar las zapatas de los frenos de los automóviles.